lunes, 20 de junio de 2016

LAS ELEGIDAS VS LA VIDA REAL

En la película de las Las Elegidas de David Pablos podemos ver de manera muy cruenta el sistema que se maneja en una casa de citas en Tijuana donde hay trata de blancas de manera muy directa. El método de que era utilizado para la contratación de señoritas en la “casa” era el de mandar a un joven a enamorar jovencitas de bajos recursos o con problemas de distintos tipos (como familiares, etc.) para luego convencerlas de que se metieran al negocio de la prostitución.

Este mismo método es utilizado también en la no ficción ya que muchas organizaciones que se encargan de éste tipo de delitos, emplean éste u otras maneras para conseguir mujeres en sus negocios. Tal fue el caso de Karla Jacinto, una superviviente de la trata de personas, que viaja con Rosi Orozco, presidenta de la Comisión Unidos Vs la Trata de Personas, compartiendo su historia con la comunidad para hacer hincapié en la importancia que tiene el cuidar a tus seres queridos para evitar problemas como estos.

Ella, Jacinto, entró a la prostitución de una forma muy parecida a la mostrada en el largometraje: proviniendo de una familia disfuncional cuyos recursos económicos no eran los mejores, encontró la atención y las adquisiciones que necesitaba y anhelaba de la mano de un joven que la convenció de irse a vivir con él y posteriormente de trabajar en la prostitución como forma de vida. Gracias a su valentía y hartazgo de injusticia, con una hija de por medio, decidió huir de su situación con todos los riegos que esto conllevaba.
Podemos concluir que la industria mediática es un reflejo de lo que pasa en la sociedad y, a su vez, la sociedad es el reflejo de lo que presentan los medios de comunicación. Y, aunque en muchas ocasiones se piense que lo que aparece en las pantallas o en las páginas de revistas o periódicos no sean más que ficción, puede que casos similares se encuentren más cerca de lo que pensamos.


Enya Larissa Cruz Morales.

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